27/6/08

A LA VUELTA DE LA ESQUINA


Nacido en 1946 de una propuesta realizada siete años antes por Jean Zay –ministro de Instrucción Pública y Artes de Francia-, el Festival de Cannes lleva 61 ediciones, y este año acogió dos filmes argentinos que van a dar que hablar. Con ustedes, las estrellas.

Dos películas argentinas participaron en la Selección Oficial del Festival de Cannes: Una de ellas es “Leonera”, dirigida por Pablo Trapero, producida y protagonizada por su esposa Martina Guzmán, que cuenta con la actuación muy especial del modelo brasileño Rodrigo Santero. Trata un tema tocado muy pocas veces –casi superficialmente- como las cárceles de mujeres, y la especial situación de las reclusas con hijos. La otra es “La mujer sin cabeza”, tercer filme dirigido y escrito por Lucrecia Martel, un “thriller” que viene apadrinado por de su gran amigo y productor -por segunda vez- Pedro Almodóvar, quien la considera como una de sus directora favoritas.

Lo único “argentino” que obtuvo un premio fue el personaje de nuestro mítico guerrillero el médico Ernesto Guevara interpretado por Benicio del Toro en el filme “Che” de Steven Soderbergh. A pesar de no haber ganado ninguna de las dos, “Leonera” causó la suficiente conmoción como para ser recordada y deseada. Tiene una trama típica pero magistralmente dirigida, y cuidada –para no caer en la mediocridad- en “detalles” como las relaciones lésbicas que se dan en las cárceles de mujeres. El filme nos muestra estos problemas sociales a través de la historia de Julia (Martina Guzmán), quien ha sido detenida luego de haberla encontrado en su departamento en el medio de un hombre herido y otro muerto. En la cárcel se entera que está embrazada –de uno de esos dos hombres- y es trasladada a una sección especial. Trapero nos muestra una situación diferente pero muy común: Julia no es una chica pobre sino de clase media, hija de una familia acomodada. La disyuntiva está en qué es mejor para el hijo de una prisionera: crecer en libertad o crecer junto a su madre.

En el filme de Lucrecia Martel una mujer cree haber atropellado a alguien, y su posterior huida del lugar la deja en un estado de conmoción. Después de este suceso siente a toda su familia como extraña, y vuelve a la ruta para encontrar solo un perro muerto… Y mucho más. Martel hace un intento de referenciar al genio del terror Stephen King, pero le faltó al guión un poco más de ese juego psicológico y de finales inesperados. Mucho más se esperaba de la elogiada directora de “La Niña Santa”, cuya obra fuera catalogada por The New York Times como uno de los diez mejores filmes estrenados en Estados Unidos durante 2005.

¿Querés participar en Cannes?

Bueno, te contamos que podés comenzar por la residencia del Festival de Cannes. La inscripción se debe hacer en línea en www.cinefondation.com, o podés escribir a residence@festival-cannes.fr. También podés contactarte con Alain Maudet, asistente del Agregado Audiovisual Regional del Servicio de Cooperación y Acción Cultural de la Embajada de Francia en Argentina, escribiéndole a Basavilbaso 1253 (C.P. 1006) Buenos Aires, o llamando al (011) 4515-2831, y también por correo electrónico a cinemateca@emb-fr.int.ar. El sitio de internet es www.emb-fr.int.ar.

Las películas deberán ser entregadas en un sobre cerrado rotulado con los siguientes datos "para Olivier Père, Quinzaine des réalisateurs", título de la película, año de producción, nombre del realizador, del productor y de la compañía productora. Tengan en cuenta que las películas se recibirán únicamente en DVD, dentro del sobre deberá incluirse un pequeño dossier con la ficha técnica, los datos de contacto (teléfono y mail del director y del productor) y una sinopsis; aquellos que deseen adjuntar otro material que consideren pertinente pueden hacerlo (carta de intención, dossier fotográfico, libro de prensa); de preferencia, los filmes deberán estar subtitulados en francés o inglés (condición no excluyente).-

¿Y LA HISTORIA?

La película dirigida por Sandra Gugliotta y protagonizada por Germán Palacios y Ana Celentano, cuenta la historia de un geólogo que viaja seguido a Santa Cruz hasta que un día su esposa descubre que no ha llegado donde debía llegar, y decide buscarlo.


Germán Palacios (Luis / Luciano), Ana Celentano (Carla), Marina Glezer (Helena) y Natalia Oreiro (Marcia) protagonizan “Las vidas posibles”, un filme escrito y dirigido por Sandra Gugliotta. Luciano desaparece sin dejar rastros, y su esposa Carla -a la que llamó para decirle que estaba a punto de llegar a destino- ante la ausencia de su marido se inquieta y comienza su búsqueda. Carla viaja hasta el sur, al pueblo donde se creía que debería haber llegado Luciano y se sorprende al encontrar a un hombre igual a su marido desaparecido, pero con otra vida y casado con otra mujer.

Toma como marco la provincia de Santa Cruz, que se impone con su fría belleza. Esta cinta ha sido declarada de interés municipal por la intendencia de El Calafate y de interés provincial por la gobernación de Santa Cruz, y fue coproducida por Argentina y Alemania. El guión de Gugliotta parece demasiado delineado e irreal. Las actuaciones son convencionales y mediocres, en una historia que quiere contar algo y termina no contando nada. Encima hay varios errores de continuidad que desconciertan al espectador y terminan desequilibrando la trama. El resultado es una típica película turística, y ya llevan varios años acostumbrándonos a lindos escenarios, pero solo con eso no se consigue hacer cine.

La historia tiene notables parecidos a dos filmes: “Bajo la arena” (2000) de Francois Ozon, y “Búsqueda frenética” (1988) de Roman Polanski. En ambos un miembro de la pareja desaparece, y el otro intenta reemplazarlo antes de aceptar su pérdida; en ambos el misterio y la incógnita son la base.

El filme tiene un manejo de cámara satisfactorio. El guión se estanca, lo que estanca las actuaciones y así la película no tiene ni comienzo ni final. La banda sonora es demasiado dramatizada y grotesca, cuando pretende ser enigmática. Este país tiene madera para más que películas corrientes, pero de un tiempo para acá financiamos películas que, para empezar, no recaudan y encima no traen un solo premio al país.-

LAS VIDAS POSIBLES (Misterio / Argentina-Alemania / 2007 / 64 minutos / ATP)

Dirección y guión: Sandra Gugliotta

Intérpretes: Germán Palacios, Ana Celentano, Natalia Oreiro, Osmar Nuñez, Marina Glezer.

Fotografía: Lucio Bonelli / Música: Sebastián Escofet / Montaje: Juan Pablo Di Bitonto

Primer Plano Films – www.lasvidasposibles.com

21/4/08

PEQUEÑA SEMBLANZA DE UNA FAMILIA TIPO ARGENTINA


Basada en la historia de una hija de inmigrantes italianos que vive actualmente en La Rioja y tiene ya 90 años, la directora, guionista y productora Mercedes Farriols -debutante en la pantalla grande- tomó en sus manos el proyecto de llevar al cine la experiencia de una familia.

Victoria Olga Sabbadini de Galli, italiana radicada en Argentina –vive actualmente en La Rioja-, es el eje en torno al que se desarrolla una trama conflictiva y cotidiana. Ricardo Galli, arquitecto radicado en San Luis, tuvo la idea de llevar al cine la historia de su familia envuelta en una crisis casi fatal. Y hasta pudo ser parte de esa historia en cámara.

Bárbara (Valentina Costamagna) es una adolescente a la que, a parte de los cambios propios de su edad, se le suma la mala relación con sus padres Leticia y Sebastián (Beatriz Spelzini y José Manuel Espeche). Vive en una sociedad donde le imponen reglas con las que ella no acuerda, y tiene un novio que no es del agrado de sus padres. Bárbara toma las llaves del auto de su padre y se va -sin permiso- a una fiesta. De regreso –tal vez alcoholizados y todavía excitados por el evento- sufren un accidente donde la muerte se adueña de la escena.

En los críticos momentos que pasan en el hospital sale a la luz la historia de la familia –una más entre los miles de sueños de los inmigrantes-, la cual es relatada por la abuela Olga (Juana Hidalgo), quien quiere sacar a Bárbara del coma. Pero no quedan de lado los conflictos entre los padres de Bárbara, un matrimonio de mediana edad que descubre sus frustraciones en medio de una vida acomodada.

Este proyecto fue declarado de Interés provincial por la Legislatura de San Luis y por la Municipalidad de la Ciudad de Villa Mercedes, y fue coproducido por la compañía española Fausto, autora del aspecto audiovisual de la La Fura del Vaus.

El relato quiere ser -y no lo logra- narrado desde un lenguaje mágico y alucinado. Posee parte del talento multifacético de Farriols, quien esta vez quiso explorar un campo poco conocido, y usar recursos que en teatro son efectivos, pero que en cine son inciertos. La situación de Bárbara pretende ser romántica, cuando se trata de una niña normal, bastante rebelde, poco contenida por sus padres: una típica nena malcriada.

Cuenta con actores de talla como la mexicana Mariana Levy (Olga de adolescente) –fallecida de un infarto a raíz de un asalto-, Pepe Novoa (el padre de Olga), y la dominicana de origen haitiano Lía Champman (Eugenia, especialista en autoayuda). La fotografía de Ricardo de Angelis hijo es efectiva, pero pareciera que la directora pretendió todo y alcanzó para poco, porque la historia no cierra.

La música está acorde con la trama mas no con los diálogos, que son forzados y vacíos. La historia trata de desarrollarse de forma casi surrealista, recurriendo a elementos oníricos, pero cae en repeticiones mecánicas, que -de todas maneras- dejan como trasfondo la sabiduría de los mayores frente a los jóvenes.-

OLGA, VICTORIA OLGA (Argentina – 2006 - Color 35 mm - 87 minutos)

Dirección y guión: Mercedes Farriols

Intérpretes: Juana Hidalgo (Olga), Beatriz Spelzini (Leticia), Mariana Levy (Olga adolescente), Manuel Espeche (Sebastián), Pepe Novoa (Michelín), Adriana Salonia (Rosa), José Luis Alfonso (Albano), Pochi Ducase (Luisa), Milagros Ansorena (Olga/Barbara niña).

Música Original: Federico Jusid / Fotografía: Ricardo De Angelis / Sonidista: Fernando Soldevila / Editor: Pablo Colafrancesco / Productora: Criacine SRL